
La accesibilidad universal es la condición mediante la que un entorno es plenamente accesible a todos los individuos, sin importar si estos sufren de alguna discapacidad motriz que dificulta su desplazamiento.
En la Ley 51/2003 se recoge todo lo referente a igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacitad, y obliga a eliminar los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitando realizar actividades cotidianas.